YO SOY DEL VIENTO, DEL RÍO, DEL MAR.
Ignacio Arocena es un nuevo talento que llega a la escena de la música latina y del mundo. Su propuesta es fresca y auténtica, donde mezcla la expresión de sus raíces, tanto étnicas como culturales.
Su vida ha estado rodeada por múltiples sónidos e influencias. Hijo de madre cubana y padre uruguayo, se crió entre Chile y Uruguay. A Ignacio la multiculturalidad lo define.
Los ritmos caribeños de Juan Luis Guerra, las melodías contagiosas de Los Bacilos y también los estilos sudamericanos folklóricos son referencias que se ven reflejadas en su música. Su estilo lírico se nutre de una mezcla diversa de los cantautores más prolíficos de Sudamérica: Jorge Drexler, Diego Torres, Andres Cepeda, Gianmarco y el español Joaquin Sabina.
Desde el campo y el folklore, hasta el mar y sus misterios; la naturaleza vibra en él.
"No es nada raro verme subido al caballo con mi guitarra … A dos piernas se mueve un cuerpo, a cuatro se mueve el alma"
Hoy Ignacio vive en Nashville estudiando Music Business. En su último año de universidad se prepara para lanzar su carrera, sin prisa pero sin pausa, con pasos firmes y con la promesa de ser siempre fiel a su esencia.
Sonidos
Ignacio obtiene sus influencias musicales de sus orígenes: el candombe uruguayo, los ritmos afro cubanos, el flamenco y los sonidos andinos; a esta mezcla se suma el sonido country, presente en su diario vivir en Nashville. Cada uno de estos sonidos forma parte de su expresión musical y de su identidad artística. Las canciones de Ignacio son alegres y positivas; historias de amor y desamor, relatos de experiencias vividas con un mensaje de esperanza, contadas con gran sentido del humor, parte innata de su personalidad.